Locución verbal que significa engañar a alguien con alguna trampa. Probablemente este modismo procede de la costumbre medieval de los taberneros de la Mancha de ofrecer un plato de queso fuerte, metido en aceite, a los compradores inexpertos antes de catar el vino que iban a comprar , para que no distinguieran el vino malo del bueno.
"anda, anda, no me la des con queso"